Se conoce como ósmosis al fenómeno físico en el que ocurre el movimiento o difusión de un diluyente a través de una membrana desde un espacio de menor disponibilidad de solutos a otro de mayor disponibilidad de solutos. Este fenómeno se da de forma natural en las células, tanto animales como vegetales, para regular la concentración de iones respecto al medio extracelular.
Para que ocurra el fenómeno de ósmosis es imprescindible que las disoluciones se encuentren separadas por una membrana semipermeable, la cual debe estar formada por poros de tan pequeño tamaño que es imposible el paso de ciertas moléculas como los iones, azúcares y proteínas, pero que presentan un tamaño permisible para el paso del agua, constituida por moléculas de un pequeño tamaño.
Así, el paso del agua a través de la membrana semipermeable u osmosis es un fenómeno independiente del gasto de energía, pues este tránsito se da específicamente por difusión pasiva.
Sin embargo, es posible alterar esta propiedad física del agua cuando ambas disoluciones contenidas se encuentran separadas por una membrana semipermeable y a la disolución de mayor concentración se le aplica presión.
De esta manera, surge el proceso de filtración o purificación del agua conocido como ósmosis inversa, que se denomina de tal manera por utilizar el principio básico de la difusión del agua a través de una membrana, pero con la vertiente en este caso de que el agua difunde por la membrana en contra del gradiente de concentración.
Diferencias entre ósmosis y ósmosis inversa.
Al comparar los procesos de ósmosis y ósmosis inversa se puede notar una diferencia central respecto al resultado de cada uno de estos y es que el fenómeno de ósmosis busca equiparar las concentraciones de las disoluciones que se encuentran separadas por una membrana, teniendo en cuenta que se trata de un fenómeno natural del que depende el equilibrio osmótico de las células en relación al medio extracelular.
En el caso de la ósmosis inversa, esta se trata de un proceso artificial o inducido que se da haciendo uso de membranas sintéticas y ejerciendo presión sobre una disolución altamente concentrada con sales para que el agua contenida en la disolución difunda hacia otro compartimiento donde hay moléculas de agua con una baja concentración de sales.
En este sentido, puede apreciarse que el proceso de ósmosis es un fenómeno natural que busca dar el equilibrio a la célula para su supervivencia, mientras que el proceso de ósmosis inversa es una técnica que se aplica como método de purificación y filtración del agua para desalinizar y poder producir agua apta para el consumo humano.
Como resultado final, después del proceso de ósmosis inversa, se obtendrá un compartimiento donde el agua presentará un estado hipertónico y otro compartimiento donde el agua presentará un estado hipotónico, mientras que tras el fenómeno de ósmosis natural se obtienen dos medios de estado isotónico debido al alcance del equilibrio osmótico.
El entendimiento de estas propiedades físicas del agua es lo que ha permitido desarrollar un método de purificación del agua libre de aditivos químicos.