Ósmosis inversa

El término ósmosis inversa hace referencia a un método de purificación del agua que tiene como base la aplicación de presión externa sobre una disolución para que los solutos se queden retenidos a través de una membrana y el agua purificada pase a un compartimento libre de iones.

De esta manera se puede bajar la concentración de iones de calcio y magnesio que se encuentran presentes en aguas saladas o duras, lo que les confiere ese sabor metalizado característico del agua con altos niveles de solutos.

La purificación del agua mediante ósmosis inversa realmente no es un procedimiento nuevo. Más bien, el perfeccionamiento de la técnica y el abaratamiento de la producción de equipos de ósmosis inversa domésticos ha favorecido que estos se encuentren difundidos cada vez más en los hogares.

Este tipo de equipamientos son considerados como unos de los más eficientes para purificar el agua y liberarla de sales, bacterias, virus y otras partículas, para así garantizar que su consumo sea sano.

¿Cómo funciona un filtro de ósmosis inversa?

Los filtros de ósmosis inversa funcionan bajo el principio fisicoquímico de difusión. Así, el agua se comporta naturalmente bajo el efecto de la presión osmótica, es decir, los solutos disueltos en ella se encuentran dispersos de forma homogénea y difunden bajo el efecto del principio de equiparación de concentraciones si se interpone una membrana.

Al hacer pasar el agua por la membrana ejerciendo presión es posible acelerar el paso del agua a través de la misma, mientras que los solutos tienden a concentrarse en el compartimiento en el que se causa presión, siendo esto equivalente a contrarrestar el efecto natural de equilibrio de concentraciones por ósmosis.

El tratamiento del agua utilizando filtros de ósmosis inversa permite entonces eliminar iones, bacterias y virus sin tener que añadir ningún tipo de aditivo químico al agua, sólo haciendo uso de un método de separación físico que puede mantenerse por largo tiempo, dependiendo de la calidad del filtro.

Ventajas de tratar el agua con ósmosis inversa

Al tratar el agua mediante ósmosis inversa es posible eliminar una cantidad importante de solutos que le confieren la dureza característica a las aguas salobres, potabilizando la misma y eliminando además cualquier gusto peculiar que esta pudiera tener.

Al incorporar un filtro de ósmosis inversa a tu hogar, estarás haciendo una inversión que podrá mantenerse en el tiempo, pues este tipo de filtros suele funcionar muy bien durante varios, años incluso décadas, siempre y cuando se les dé el mantenimiento adecuado. Además, su durabilidad dependerá del grado de dureza del agua.

Al hacer el tratamiento de ósmosis inversa al agua no sólo se garantiza la eliminación de iones que pueden afectar la salud de las personas, sino que también es posible eliminar la carga de bacterias o virus que pueda presentar la misma. Estas membranas tienen poros tan pequeños que no permiten su paso hacia el compartimento de filtración.

Esta es una forma de purificar el agua que carece de todo tipo de riesgo sobre la salud humana, ya que se trata de un método de purificación físico en el que no hay participación de agentes químicos, como el cloro, para mejorar la calidad del agua.